Crónicas republicanas
El fraude “científico” del Día del Yaracuy (2)
Lisbella Páez
El fraude es lo contrario a la verdad, equivale a engaño, simulación entre lo que se piensa o se dice o se hace creer, instigando o induciendo a otra persona a actuar en forma interesada, o puede ser la falta de verdad en lo que se dice o se hace. Es decir es un acto intencional con el objeto de lesionar los derechos de los otros, en fin, es suministrar información falsa, engañosa.
La investigación científica, produce conocimiento verdadero, pero la realizada según el legislador Henry Mogollón que dijo que” para este cuerpo legislativo es importante el trabajo de investigación e histórico que se hizo para restituir la fecha gloriosa en que Zamora nos convirtió en un estado independiente, un día como hoy (ayer) el general de los pueblos decretó como entidad federal y luego dejo instalado el gobierno regional de Yaracuy”. Este “importante el trabajo de investigación e histórico” para lo único que sirvió fue para producir fraude.
Esta investigación fue extraña, no produjo como debe producir todo trabajo de investigación nuevos aportes y materiales para su interpretación, como documentos, fotografías, afiches, restos materiales como armamento, utensilios de cocina, de trabajo, lápices, plumas, papeles, vestuario, para escribir entre otros, que pudieran arrojar luz sobre el hecho histórico.
A la luz de todas las declaraciones, esta se quedo en un arqueo bibliográfico, especialmente del libro, Tiempo de Ezequiel Zamora, de mi estimado y recordado Maestro Federico Brito Figueroa, que un día contándonos su estadía en esta tierra, nos comento sobre la bitácora de Prudencio Vásquez.
En cuanto la restitución de la cual habla el diputado Mogollón, no es verdad, pues según la Real Academia Española es la “Acción y efecto de devolver “y en este caso si se restituye el Día de Yaracuy el 28 de marzo, es porque ese día se sanciona la Constitución de 1864 mediante el cual todas las provincias adquieren la categoría de estados y no porque por aquí paso Zamora.
Se ve clarito, el pequeño error de confundir el 28 de marzo de 1859 con el 28 de marzo de 1864.
También por las declaraciones se nota que hubo consulta de periódicos, pero muy pocos, hasta allí llego el “trabajo de investigación e histórico que se hizo para restituir la fecha gloriosa en que Zamora nos convirtió en un estado independiente, un día como hoy (ayer) el general de los pueblos decretó como entidad federal y luego dejo instalado el gobierno regional de Yaracuy”
Y en esa revisión, el, la, los o las investigadores, porque si hubo investigación necesariamente hubo gente que la ejecutó, cuando se toparon con el Boletín que rezaba que el 28 de marzo se celebraba el Día de Yaracuy, pensaron que era por Ezequiel Zamora. Craso error de un investigador que no critico, ni evaluó las fuentes y se guiaron por lo escrito en unos periódicos unos libros, los Boletines Oficiales de 1945,1959 y una carta escrita en 1959 por Ana Elisa López.
El fraude “científico” del Día del Yaracuy (2)
Lisbella Páez
El fraude es lo contrario a la verdad, equivale a engaño, simulación entre lo que se piensa o se dice o se hace creer, instigando o induciendo a otra persona a actuar en forma interesada, o puede ser la falta de verdad en lo que se dice o se hace. Es decir es un acto intencional con el objeto de lesionar los derechos de los otros, en fin, es suministrar información falsa, engañosa.
La investigación científica, produce conocimiento verdadero, pero la realizada según el legislador Henry Mogollón que dijo que” para este cuerpo legislativo es importante el trabajo de investigación e histórico que se hizo para restituir la fecha gloriosa en que Zamora nos convirtió en un estado independiente, un día como hoy (ayer) el general de los pueblos decretó como entidad federal y luego dejo instalado el gobierno regional de Yaracuy”. Este “importante el trabajo de investigación e histórico” para lo único que sirvió fue para producir fraude.
Esta investigación fue extraña, no produjo como debe producir todo trabajo de investigación nuevos aportes y materiales para su interpretación, como documentos, fotografías, afiches, restos materiales como armamento, utensilios de cocina, de trabajo, lápices, plumas, papeles, vestuario, para escribir entre otros, que pudieran arrojar luz sobre el hecho histórico.
A la luz de todas las declaraciones, esta se quedo en un arqueo bibliográfico, especialmente del libro, Tiempo de Ezequiel Zamora, de mi estimado y recordado Maestro Federico Brito Figueroa, que un día contándonos su estadía en esta tierra, nos comento sobre la bitácora de Prudencio Vásquez.
En cuanto la restitución de la cual habla el diputado Mogollón, no es verdad, pues según la Real Academia Española es la “Acción y efecto de devolver “y en este caso si se restituye el Día de Yaracuy el 28 de marzo, es porque ese día se sanciona la Constitución de 1864 mediante el cual todas las provincias adquieren la categoría de estados y no porque por aquí paso Zamora.
Se ve clarito, el pequeño error de confundir el 28 de marzo de 1859 con el 28 de marzo de 1864.
También por las declaraciones se nota que hubo consulta de periódicos, pero muy pocos, hasta allí llego el “trabajo de investigación e histórico que se hizo para restituir la fecha gloriosa en que Zamora nos convirtió en un estado independiente, un día como hoy (ayer) el general de los pueblos decretó como entidad federal y luego dejo instalado el gobierno regional de Yaracuy”
Y en esa revisión, el, la, los o las investigadores, porque si hubo investigación necesariamente hubo gente que la ejecutó, cuando se toparon con el Boletín que rezaba que el 28 de marzo se celebraba el Día de Yaracuy, pensaron que era por Ezequiel Zamora. Craso error de un investigador que no critico, ni evaluó las fuentes y se guiaron por lo escrito en unos periódicos unos libros, los Boletines Oficiales de 1945,1959 y una carta escrita en 1959 por Ana Elisa López.
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